Una de las vinotecas más importantes de la ciudad cerró su participación en el proyecto que se propone recuperar el tradicional inmueble de la esquina de peatonal Córdoba y Sarmiento, convirtiéndolo en una tienda departamental con servicio gastronómico.

La Favorita fue fundada en 1897 por Ramón y Ángel García, dos hermanos asturianos que se inspiraron en las grandes tiendas departamentales europeas de la época y se convirtió en uno de los espacios comerciales más emblemáticos de Rosario. Tras la salida de la empresa chilena que la compró a mediados de la década del 90, un grupo empresario local planea su reapertura para mediados de este año. La propuesta que busca revitalizar y dale nuevo aire al centro rosarino, prevé la puesta en marcha de un centro comercial que estará acompañado por una propuesta gastronómica que también incluirá buenos vinos, ya que la vinoteca Positano Vinos acaba de cerrar su participación en el proyecto.
Si bien todavía es muy temprano para conocer detalles, sí se puede confirmar que Positano Vinos participará con una propuesta mixta que incluye los productos y servicios de la vinoteca, además de gastronomía especialmente preparada para acompañar vinos y coctelería. Así lo confirmaron desde el área de marketing de la empresa, quienes adelantaron que con el correr de los días darán más precisiones sobre el asunto.
“El acuerdo se cerró hace una semana, así que todavía no tenemos muchas precisiones. La idea es llevar las líneas de etiquetas de gama media y alta y combinarlas con diferentes maridajes”, adelantaron desde el área de Marketing de la empresa.
El fenómeno Positano
Positano es actualmente una de las vinotecas más importantes de Rosario en cuanto a volumen de ventas, aunque también ofrece otros servicios como un animado club de cata, la organización de viajes a zonas enoturísticas y eventos de trascendencia como la Positano Wine Festival que se realiza en los salones de Metropolitano. El local de La Favorita será el quinto de la firma que ya tiene otro en el centro, sobre calle Rioja (donde funcionaba la desaparecida Rey de Copas) y que se sumarán a los de Refinería, Fisherton y Funes.